La cosa es que se trata de una adaptación muy libre de unos huevos parsi, uno de los platos de la cocina parsi, que tiene su origen en el noroeste indio y en Pakistán. Como una es gaditana y toda receta exótica que escriba aquí va a ser casi siempre una farsa (a fin de cuentas existen mil variantes de la misma receta en internet, aparte de que una está limitada a los ingredientes locales, y de que lamentablemente no tengo a mano ninguna abuela entrañable de la región que me confirme la receta), pues decidí quedarme con Huevos Farsi. Y ahora la receta.
Es un revuelto, un simple revuelto que apaña una cena rápida o un brunch de domingo, que es sanote y sobre todo diferente.
Ingredientes (2 personas)
- 4 huevos de pollos felices*
- 1/2 pimiento rojo, cortado a daditos de 1/2 cm de lado.
- 1 cucharada de jengibre fresco muy picado
- 2 cucharadas de cilantro fresco picado
- 1 puerro, cortado en aros de 1/2 cm, la parte clara solamente (en su defecto cebolleta)
- 1 tomate grande maduro pero firme, cortado a daditos de 1/2 cm de lado
- 1 guinduilla seca, cortada en dos (opcional)
- 1 cucharadita de polvo de curry o de cúrcuma (opcional)
Y el proceso en sí es bastante fácil...
Poner el pimiento y el puerro con una cucharada o dos de aceite de oliva a refreír en una sartén grande junto con el jengibre, a fuego medio - alto. Dejarlo dorar un poco (<5 min), dejando que se empiecen las reacciones de Maillard que hacen que todo esté más rico cuando está doradito. Añadir el tomate (se echa después, porque al soltar agua impediría que se doren las verduras si lo echas antes). Aderezar con la cúrcuma o el curry, la guindilla, sal y pimienta molida fresca (¡muy importante! La pimienta recién molida no tiene nada que ver con el polvo parduzco que compras en el supermercado). Remover un poco para que se caliente el tomate y suelte agua. Añadir el cilantro picado, reservando un poco para servir.
Subir el fuego y añadir los huevos. A mí me gusta dejarlos sin remover al principio, para que cuaje un poco la clara, a fuego muy fuerte. Después les doy un par de meneos, pero sin exagerar y los sirvo directamente. La idea es que el huevo siga estando jugoso, además me gusta que se queden más o menos separados clara y yema. Y los hago a fuego fuerte porque me encanta la clara doradita.
Servir muy caliente, recién hecho, con el cilantro picado que quedaba por encima.
Realmente los ingredientes son muy variables - a la misma combinación de especias se le puede poner cualquier verdura que tengáis en la nevera susceptible de ser refrita, en la foto se ve algún champiñón que nos sobró de la pseudo-carbonara del día anterior. Eso sí, el tomate hace que esté jugosito. En otras recetas he visto que le ponen leche a los huevos para que quede más cremoso, eso lo dejo al gusto del consumidor. Y el curry o la cúrcuma le dan un color muy bonito, pero tampoco son imprescindibles si no están a mano.
* Los pollos felices son pollos que no están metidos en una jaula donde no pueden hacer nada más que poner huevos, sino que pueden moverse libremente en su parcelita al aire libre. La alimentación no se basa en pienso sino en cereales. Tengo comprobado que se nota mucho en el sabor, e incluso en el huevo en sí (la cáscara es mucho más dura).
eiiiiiii, este finde probamos tu receta... aunque los nuestro si que era farsi del todo. Los huevos no era de pollos felices, usamos la pimienta de la que viene ya molida y no encontramos cliantro... asi que imaginate. Aun así estaba muy bueno asi que con la de verdad tiene que ser la caña!!!
ResponderEliminarMuy bien, veo que habéis captado totalmente el espíritu de los huevos Farsi, aunque tengo que decir que los huevos de pollo feliz son un punto importante! :)
ResponderEliminarQué ilu que hayáis probado una receta!!! =)))